PAGINAS

martes, 18 de agosto de 2009

PONENCIA DEL ENCUENTRO DE CRONISTAS DE CALABOZO 2009





CALLE 1 DEL CASCO CENTRAL DE CALABOZO:

SU GENTE Y SITIOS EMBLEMATICOS, (1938 – 2007)

Ysnardo N. Conigliaro B.

Si tomando como referencia, uno de los pocos textos que describen la conformación física del Calabozo de las tres primeras décadas del siglo XX: Lugares y Gentes de mi Pueblo (1968) de Jesús José Loreto Loreto, donde el autor comienza a describir la ciudad, entre añoranzas y recuerdos, diciendo que las pocas calles del pueblo (sentido Norte – Sur), empezaban desde la calle Roscio, actual calle 2, hasta la calle 7. Allí el historiador, agrupa el recuerdo, original y minucioso, de las calles y sus casas; y de las gentes que las habitaron en el periodo que él evoca (1920-1930). En esta descripción física del Calabozo de entonces, no aparece para nada la calle 1, objeto de nuestro presente trabajo investigativo.

Esta omisición, despertó nuestra curiosidad investigativa y con las escasas fuentes escritas que existen sobre este tema, comenzamos a indagar sobre los orígenes de esta pintoresca calle, guiándonos por los testimonios orales de los habitantes de la tercera edad que fueron sus primeros habitantes.

La configuración de esta calle, comienza en el sentido Este-Oeste y tiene un recorrido de cinco esquinas, comenzando en la carreras 11 y terminando en la carrera 15. Sus vecinos, son personas de orígenes humildes, venidos en su mayoría de los diferentes medios rurales de nuestra geografía nacional, particularmente de las regiones conformadas por los estados llaneros. Debido a esta condición, decidieron residir en este particular sitio de la ciudad que en gran parte conserva la mayoría del conjunto ambiental del medio rural de donde provienen; es decir, en esta calle se puede oír, por las mañanas y tardes, los cánticos de los pájaros de nuestra región (loros, guacamayas, guacharacas, pericos y otros) y el aullido de los araguatos que habitan en las riberas del río Guárico, el cual se encuentra a escasos metros, hacia el Norte, bordeando todo su recorrido. Esta característica les da la comodidad de vivir muy cercano al medio ambiente rural y a la vez muy cerca del núcleo urbano de la ciudad, donde se encuentra la mayor parte de institutos educativos para sus hijos; las iglesias y sus servicios religiosos, así como también la arteria comercial de la ciudad.

Estas condiciones privilegiadas les permitieron decidir a buscar hábitat en este sitio pintoresco de Calabozo, aunado a la condición humilde y sencilla de los pocos vecinos que la habitaban en aquel entonces. Para comprender mejor su desarrollo urbanístico, decidimos dividir esta historia en dos periodos:

1.- Antes de la construcción de la represa y 2.- Después de la construcción del embalse y posterior creación del Sistema de Riego Río Guárico.

PRIMERA ETAPA: 1938-1946

En esta primera etapa, de acuerdo a los testimonios orales, la misma consistía en un caminito donde se formaban dos grandes charcos que se llenaban en épocas de lluvias formando enormes lagunas y por grandes surcos en la tierra producto de la escorrentía de aquellas aguas que se desplazaba con rapidez por el terreno inclinado, erosionándolo, y dejando al descubierto las capas interiores, mezcla de arcilla y limo, cubierto por un manto de hiervas y malezas silvestres, típicas de la zona, sin la intervención del hombre y sus maquinas. En este periodo, eran escasas las casas construidas en las cuatro cuadras que la conforman a todo lo largo, pues en realidad, no era una calle como tal, sino un camino usado para llegar al Puerto Colonial de Calabozo “Las Escalinatas”, al antiguo cementerio, a las vegas de trabajos del río Guárico que la bordea en todo su recorrido, o para ir a pescar en las orillas del mismo. Estas viviendas eran de tipo rural, es decir, sus paredes eran de cañizo, varas delgadas de madera, amarradas paralelamente, en su mayoría con cortezas de árboles, apalmesadas con barro. Muy común para la época. La economía de la ciudad estaba muy deprimida, ya que en 1934 el general Juan Vicente Gómez, Presidente de la República en ese periodo, había despojado a Calabozo del privilegio de ser Capital de Estado, trasladándola hasta San Juan de los Morros, dejando la ciudad sumida en una orfandad administrativa, uno de los principales sustento de su vida económica y comercial.

Debido a este acontecimiento, todas las oficinas del gobierno regional fueron trasladadas para la nueva capital del Estado y muchas familias de la época, tomaron la decisión de emigrar y fijar su lugar de residencia en San Juan de los Morros, Caracas, Valencia, y otras ciudades centrales del país, quedando Calabozo casi despoblado. Solo los habitantes con arraigo de pertenencia y los que no poseían los medios económicos para trasladarse hacia otras regiones, se quedaron.

Ante este panorama, puede comprenderse la situación que vivía Calabozo para 1938, año que tomaremos como punto de partida, para indagar y reconstruir los orígenes de esta calle, basándonos en los testimonios orales de la señora Guadalupe Lara, nacida y criada aquí y que para la época contaba con 10 años de edad, de la señora María Aular de Isseles, también nacida y criada en el lugar y menor que Guadalupe, dos años. De Guillermina Mesa de Rodríguez, Josefa Pérez, Benjamín Rodríguez, Eloy Morillo, Julián Hernández, y otros, fuentes principales de este relato, a quienes damos nuestras más profundas muestras de agradecimientos por su invalorable colaboración En este periodo, sus pocos habitantes carecían de todos los servicios públicos elementales que ahora conocemos (agua potable por tubería, energía eléctrica, gas domestico, etc.). El agua potable era traída en vasijas de un manantial cercano que quedaba en las riberas del río, en el sitio denominado “El Táque” ó de la aguada arriba. Para cocinar, utilizaban leña, traída de los alrededores y para alumbrarse en las noches, lámparas de kerosén, o a gasoil.

SEGUNDA ETAPA: 1946-2007

Así vivian su existencia, luchando ante las adversidades y las precarias condiciones de entonces, hasta que se inició la construcción de la Represa de Calabozo (1954-1956) y posterior construcción y puesta en funcionamiento del “Sistema de Riego Río Guárico” (1960). La geografía Calaboceña comenzó a expandirse, con la llegada de mano de obra calificada venida de otros lugares, Las condiciones de vida mejoraron con la aparición repentina de buenos sueldos por los trabajos de la construcción del embalse, que impulsó la economía de esta región. Este bum económico afectó de igual manera a la calle 1 de nuestro Casco Histórico Colonial. Sus habitantes, comenzaron a mejorar sus viviendas. Los techos de palmas, fueron reemplazados por techos de zinc, las paredes de barros, cambiadas por bloques de cemento y muchas de ellas dividieron sus terrenos, para dar paso a otras casas contiguas, que ocuparían los miembros de sus mismas familias que iban creciendo y formaron sus hogares al lado de los de sus progenitores, y en otros casos, para ser vendidos a terceros que buscaron terrenos para construir y vivir en ese lugar.

Los primeros vecinos que comenzaron a poblar la calle 1 de Calabozo, fueron personas de orígenes humildes, venidos en su mayoría de los diferentes medios rurales de nuestra geografía nacional, particularmente de las regiones conformadas por los estados llaneros. Debido a esta condición, decidieron residir en este típico lugar de la ciudad, que conserva la mayoría del conjunto ambiental del medio rural de donde provenían; es decir, en esta calle se podía oír, por las mañanas y tardes, los cánticos de los pájaros de nuestra región (alcaravanes, pericos, loros, guacamayas, guacharacas, y otros) y el aullido de los araguatos que habitan en las riberas del río Guárico, el cual se encuentra a escasos metros, hacia el Norte. Esta característica, que hoy día se conservan inmutables, les dieron la comodidad de vivir muy cercano al medio ambiente rural y a la vez muy cerca del núcleo urbano de la ciudad, donde se encuentran la mayor parte de los institutos educativos para sus hijos; iglesias para los servicios religiosos, así como la arteria comercial de la ciudad.

Los 18 terrenos con sus antiguas viviendas, que habían en la primera etapa (1938-1946), se transformarían en 41 terrenos con viviendas mejoradas, producto del ingenio y tesón de sus anteriores vecinos, que junto a los nuevos habitantes tuvieron que crear nuevos espacios donde habitar y que con el correr de los años se fueron adaptando a los nuevos avances científicos y tecnológicos de la vida moderna, para ir consolidando y adaptando sus viviendas a las exigencias de los nuevos tiempos, incorporando los servicios básicos de agua potable a través de tuberías (1960), Gas doméstico (1962), Cloacas (1963), Teléfonos residenciales (1965), Electricidad (1969), Asfaltado (1874), Televisión por Cable (1993).

SITIOS EMBLEMÁTICOS

LAS ESCALINATAS:

Antiguo puerto colonial de la ciudad, cuya estructura consta de unas escaleras de concreto de 3,30 m. de ancho por cien de largo aproximadamente, que salen en sentido Norte, desde la carrera 13 con la calle 1, hasta las orillas del Río Guárico. En sus primeros tiempos tenían 72 escalones y en la actualidad sólo tiene 64, contados así: 35 escalones, seguido de un descanso y después 28 escalones más, pues los escalones finales han desaparecido, producto de los derrumbes ocurrido, como ocurrido en el año 1967, cuando una gran parte de las orillas del barranco, se desplomó. El estado físico actual de estos escalones o gradas, es el de total deterioro, pues están en su gran mayoría, fracturados y destruidos. Las dimensiones de cada uno, son las siguientes: Largo = 3,30 m., Ancho = 80 cms. y Espesor = 20 cms. Las del descanso son similares a la de los escalones en cuanto al largo y espesor, variando solamente en lo ancho, el cual mide 3 metros.

Allí funcionó un antiguo paseo que data de principios del siglo XX, cuando en 1911, bajo el gobierno del general Juan Vicente Gómez, las revistieran de concreto, en ocasión de conmemorarse el centenario de la visita que hiciera a Calabozo el canónico Chileno José Cortés de Madariaga (15 de Agosto de 1811), quien tuvo destacada actuación en los sucesos independentistas del 10 Abril de 1810. En tiempos de la colonia, allí llegaban los barcos a vapor, bongos y curiaras que formaban la red comercial, trayendo mercancías de otras regiones del país y del extranjero. Para ese entonces, la mayor parte de la red comercial se realizaba por vía fluvial y marítima, debido a la escasez de carreteras. Actualmente este sitio está completamente abandonado, lleno de basura y tapizado de tierra. Se hace necesario rescatarlo del olvido en que se encuentra, devolviéndole el esplendor perdido, pues este pintoresco e histórico lugar forma parte de nuestro patrimonio cultural, que tiene mucho que ver con la economía colonial de Calabozo y con la historia de los ilustres visitantes que pasaron por este típico lugar.

CAPILLA DE SANTO ROSTRO

Ubicada en la calle 1 entre las carreras 13 y 14. Consiste en una pequeña capilla donde se le rinde culto a Santo Rostro, el cual consta de una pequeña piedra de unos 10 cms. de diámetro donde puede observarse la imagen de un rostro humano esculpido por prodigios de la naturaleza. La piedra, se asemeja al rostro aparecido en el lienzo cuando la Verónica secó el rostro de nuestro señor Jesucristo, camino al calvario. Descansa sobre una base de madera, ambas pulidas por el constante acariciar de las agradecidas y fervorosas manos que la tocan para persignarse, y se encuentra rodeada de cuadros con imágenes de Vírgenes, del Sagrado Corazón de Jesús y otros Santos que conforman el santoral católico; donde acuden los creyentes con flores, velas y figuritas metálicas de oro, plata, cobre ó aluminio para pagarle la(as) promesa(as) ofrecida(as) a él ó los milagros concedidos por el Santo. Estas ofrendas sirven para adornar su altar, donde acuden los devotos a ofrendar sus plegarias al Santo Rostro, rezando una y otra vez el Santo Rosario. Este Santo se la pasa viajando en su pequeño nicho de madera para sitios donde sus fervorosos seguidores le ofrecen velorios como pago por haber librado de ratas, mabita o sogata sus siembradios de arroz, maíz y otros rublos ya porque le hizo aparecer algún animal, objeto o persona extraviada ó por haberle hecho el milagro de recobrar su salud.

ANTIGUO CEMENTERIO ABANDONADO

En la calle 1 de Calabozo, existió un cementerios que en la actualidad está clausurados y en el espacio que ocupaba, existen hoy día, tres viviendas ocupadas por familias vecinas. Recuerda la señora Guadalupe Lara, que para el año 1938, ella tenía 10 años de edad y para ese entonces, dicho cementerio se encontraba clausurado y abandonado. Existían, en sentido Este-Oeste, dos paredes que delimitaban el espacio ocupado por este cementerio, las cuales llamaremos: pared Este y la pared Oeste. La primera estaba ubicada en la esquina de la actual carrera 14 con calle 1, en la casa ocupada por la señora María Dolores Barreto, popularmente conocida como “Doña Lola” y su familia. La segunda estaba ubicada en la cerca que divide las casas de Don Clorindo Méndez y su familia y la casa de la Familia Rodríguez-Mesa, compuesta por Don Brígido Rodríguez, su esposa Guillermina Mesa y su numerosa descendencia compuesta por 14 hijos(as). De la primera pared no quedan vestigios, de la segunda hoy día pueden verse partes de los materiales con que estaba construida. Se cuenta que en este cementerio, se sepultaban a las personas de la clase social baja de la época colonial.

Gacetas oficiales

Gacetas oficiales
toca el icono

¿Cómo colaborar con los refugiados del mundo?

¿Cómo colaborar con los refugiados del mundo?
toca es te icono y ayuda a un refugiado

Libros Budista Gratuitos para bajar

Museo Geológico Virtual de Venezuela

Museo Geológico Virtual de Venezuela
Auspiciado por PDVSA-INTEVEP

He aquì tu portal para crear audiolibros y escucharlos bajarlos y llevarlos

He aquì tu portal para crear audiolibros y escucharlos bajarlos y llevarlos
haz clik aqui

LIBROS MALDITOS

LIBROS MALDITOS
Interesante portal que te enriquecerà, toca el icono