Letras venezolanas reciben premios de Salamanca
Un euro para Guillermo Morón, Ramón Palomares y Viloria Vera
Morón agradeció ser premiado por su obra literaria (Nicola Rocco)
Contentos y satisfechos se sienten los tres escritores venezolanos ganadores de los premios Iberoamericanos de Literatura 2010: Guillermo Morón (Carora, 1926), Ramón Palomares (Escuque, 1935) y Enrique Viloria Vera (Caracas, 1950), galardones instituidos por la Sociedad de Estudios Literarios y Humanísticos de Salamanca (SELIH).
Los tres coinciden en la identificación que sienten con el epónimo de la mención correspondiente.
Así, Morón, Premio Miguel de Unamuno de Narrativa Iberoamericana, se confiesa de Unamuno "uno de sus grandes admiradores. He publicado mucho sobre él, y lo primero que hice al ir a Salamanca en 1951 fue conocer la cátedra don Miguel de Unamuno".
Le alegra a Morón que le hayan dado el premio "no como historiador ni ensayista, sino como narrador y fabulista, y además porque el premio es la publicación de un libro que ellos escogen".
Lo que más entusiasma a Enrique Viloria Vera, poeta y catedrático de la Universidad Metropolitana, es que se trata de "un excelente reconocimiento al talento de tres generaciones: Morón con sus 84 años, Palomares nacido en el 35 y yo del año 50, es un premio no a un talento estático, sino a la creación permanente, progresiva".
Viloria Vera se hace acreedor del Premio Iberoamericano de Ensayo Alfonso Ortega Carmona, quien es "uno de los grandes sabios vivos. Lo conozco personalmente y ese epónimo es una maravilla. Más contento no puedo estar, es muy reputado en Salamanca y Europa, y muy vinculado a Venezuela; sobre todo a la Universidad de Los Andes, excelente en trabajos de Filología, formador de políticos, Ética y Oratoria".
El poeta Ramón Palomares fue designado como Premio Fray Luis de León de Poesía Iberoamericana y, por supuesto, dice, "tener el premio con el nombre de un poeta y un ser tan maravilloso como Fray Luis de León, necesariamente es algo muy feliz, me siento muy complacido por la gentileza, bondad y atención de mis amigos lectores de Salamanca. El nombre de Fray Luis es para mí inmensamente significativo porque desde mi juventud siempre lo admiré, y su poesía es para mí uno de los himnos más hermosos de la literatura castellana".
Palomares comenta que hizo un texto "que está en el libro Vuelta a casa, a propósito de Fray Luis de León cuando está preso, y él mira a lo lejos desde su prisión a su adorada Salamanca".
Los tres ganadores también coinciden en la justeza del premio: un euro, lo cual da a entender que el metálico no es lo importante, sino la calidad de la obra y la trayectoria que se honra; así como la publicación de sendos libros de los ganadores. En esta oportunidad el jurado estuvo formado por Alfredo Pérez Alencart, los profesores Alfonso Ortega Carmona, Carmen Ruiz Barrionuevo, Ángel Infestas y Ángel San Juan; los poetas Luis Frayle y Verónica Amat, y el pintor Miguel Elías.
Este premio comenzó a entregarse el año pasado, y fueron tres escritores brasileños los reconocidos. La entrega será en septiembre, y desde ya se supo por Pérez Alencart que el próximo país ganador podría estar entre Argentina y México.
Los tres coinciden en la identificación que sienten con el epónimo de la mención correspondiente.
Así, Morón, Premio Miguel de Unamuno de Narrativa Iberoamericana, se confiesa de Unamuno "uno de sus grandes admiradores. He publicado mucho sobre él, y lo primero que hice al ir a Salamanca en 1951 fue conocer la cátedra don Miguel de Unamuno".
Le alegra a Morón que le hayan dado el premio "no como historiador ni ensayista, sino como narrador y fabulista, y además porque el premio es la publicación de un libro que ellos escogen".
Lo que más entusiasma a Enrique Viloria Vera, poeta y catedrático de la Universidad Metropolitana, es que se trata de "un excelente reconocimiento al talento de tres generaciones: Morón con sus 84 años, Palomares nacido en el 35 y yo del año 50, es un premio no a un talento estático, sino a la creación permanente, progresiva".
Viloria Vera se hace acreedor del Premio Iberoamericano de Ensayo Alfonso Ortega Carmona, quien es "uno de los grandes sabios vivos. Lo conozco personalmente y ese epónimo es una maravilla. Más contento no puedo estar, es muy reputado en Salamanca y Europa, y muy vinculado a Venezuela; sobre todo a la Universidad de Los Andes, excelente en trabajos de Filología, formador de políticos, Ética y Oratoria".
El poeta Ramón Palomares fue designado como Premio Fray Luis de León de Poesía Iberoamericana y, por supuesto, dice, "tener el premio con el nombre de un poeta y un ser tan maravilloso como Fray Luis de León, necesariamente es algo muy feliz, me siento muy complacido por la gentileza, bondad y atención de mis amigos lectores de Salamanca. El nombre de Fray Luis es para mí inmensamente significativo porque desde mi juventud siempre lo admiré, y su poesía es para mí uno de los himnos más hermosos de la literatura castellana".
Palomares comenta que hizo un texto "que está en el libro Vuelta a casa, a propósito de Fray Luis de León cuando está preso, y él mira a lo lejos desde su prisión a su adorada Salamanca".
Los tres ganadores también coinciden en la justeza del premio: un euro, lo cual da a entender que el metálico no es lo importante, sino la calidad de la obra y la trayectoria que se honra; así como la publicación de sendos libros de los ganadores. En esta oportunidad el jurado estuvo formado por Alfredo Pérez Alencart, los profesores Alfonso Ortega Carmona, Carmen Ruiz Barrionuevo, Ángel Infestas y Ángel San Juan; los poetas Luis Frayle y Verónica Amat, y el pintor Miguel Elías.
Este premio comenzó a entregarse el año pasado, y fueron tres escritores brasileños los reconocidos. La entrega será en septiembre, y desde ya se supo por Pérez Alencart que el próximo país ganador podría estar entre Argentina y México.
Ana María Hernández G.
EL UNIVERSAL
